Conjunto normativo de ideas y creencias colectivas.
Para Destutt de Tracy, creador del término en pleno auge de la Ilustración, la ideología se trataba de una ciencia de las ideas, entendiendo las ideas como estados de conciencia. Ya en su época el concepto comenzó a soportar una carga negativa e incluso peyorativa, como la que le imprimía Napoleón Bonaparte, con su escepticismo acerca de la labor de los “ideólogos”.
En el siglo XIX, en la obra de Karl Marx y Friedrich Engels -particularmente en La ideología alemana y Contribución a la crítica de la economía política– la ideología se asocia a la superestructura, como conjunto de principios que explican el funcionamiento del mundo en cada sociedad histórica, en función de sus correspondientes modos de producción:
”Por ideología venían a entender los dos revolucionarios alemanes el conjunto de concepciones y presunciones que las gentes profesamos como previas y a través de las cuales entendemos o creemos entender la realidad y procedemos a intentar cambiarla para adaptarla a nuestras preferencias.”1
Algunas interpretaciones de la teoría de Marx y Engels han derivado en un desdén hacia el concepto de ideología. Este enfoque se fundamenta en que todo el mundo tendría por necesidad una ideología, puesto que todos vivimos en sociedad, y ello conllevaría que “su eficacia como instrumento cognitivo es nula”.2 Este menosprecio ha sido contestado por otras interpretaciones del pensamiento marxista y en particular el neomarxismo y las teorías críticas. La respuesta brindada es que la lucha de poderes que existe en toda sociedad también se manifiesta en el enfrentamiento entre ideologías, que compiten e intentan exterminarse mutuamente.
- Cotarelo, R. (2015). Introducción a la política. Valencia: Tirant Lo Blanch, p. 142.
- Cotarelo, R. (2015). Introducción a la política. Valencia: Tirant Lo Blanch, p. 143.